martes, 3 de marzo de 2015

Aprendiendo de Mercadona


Las empresas pequeñas podemos aprender mucho de las empresas grandes que están creciendo en sus mercados debido a que han sabido realizar constantes innovaciones. Este es el caso de Mercadona.
Si nos acercamos a uno de sus establecimientos con el objetivo de conocer y aprender de sus procesos de innovación, veremos que el modelo de negocio y de gestión están muy consolidados.  
Su éxito comercial se basa en satisfacer a los clientes con sus productos de calidad y con su modelo comercial en la fórmula de Siempre Precios Bajos (SPB). Para lograr este objetivo su estrategia es hacer sólo aquello que añada valor al cliente y por lo que esté dispuesto a pagar.

Esta implantación en la realidad es posible por los acuerdos a largo plazo con los interproveedores. Este concepto clave se está ampliando hacia la Cadena Agroalimentaria Sostenible que conlleva un cambio de mentalidad radical en su personal para “ser más tenderos”, recuperando los oficios y la calidez en el trato del comercio tradicional.
Así, fruta y verdura de proximidad, pescado fresco directo de lonja, horno donde se incluyen productos a granel, y carne y charcutería al corte. Esta transformación supone mayor empleo en el entorno. En Aragón asciende a casi 10.000 trabajadores. Este paradigma de sostenibilidad se amplía al impacto medioambiental en logística, ahorro energético y gestión de residuos.

La primera medida es el transporte de las mercancías más eficiente, transportando más con menos. Se consigue evitando que los camiones circulen vacíos, planificando rutas en las que un vehículo se llene al máximo y vaya descargando y cargando género sucesivamente. Lo constatamos en la tiendas con unos almacenes muy reducidos.
El ahorro energético lo vemos en los supermercados con el aprovechamiento de la luz natural, la regulación automática de las luminarias y los techos más bajos que reducen el volumen de aire a climatizar.

Cada tienda cuenta con una persona dedicada al mantenimiento preventivo. Especial atención merece la revisión diaria de las instalaciones de refrigeración de alimentos, ya que suponen el 50% del consumo energético del supermercado.
La primera estrategia para prevenir los residuos de los alimentos es el Ecodiseño. Lo evidenciamos en la sustitución de los materiales de los productos para que pesen y ocupen menos, así como un diseño que facilita un apilado más eficiente.

Muy importante, también, son las medidas para prevenir los residuos de los alimentos en su origen (aprovechando toda la producción que genera el proveedor) y en la tienda, adoptando prácticas para dar salida a los productos antes que se estropeen.
La gestión y el reciclaje de los residuos comienzan en la propia tienda clasificando y compactando. La “logística inversa” de los camiones permite su transporte. Para evitar el impacto de los contenedores de basura en la calle, se guardan internamente.

El máximo grado de reducción de los residuos es su reaprovechamiento (Economía Circular) recuperando lo plásticos para hacer nuevos productos o envases, así como  valorizando subproductos de los proveedores.
Todas estas medidas descritas suponen una clara apuesta por la innovación como una herramienta de diferenciación y clave de competitividad en el producto, el proceso, el concepto y la tecnología.

Esta importancia de la innovación conlleva que el personal dedicado al I+D en los fabricantes interproveedores duplique la media de sus sectores. Por ello, en la empresa, se le denomina I+D + doble i, siendo está segunda “i” la inversión.
Cuando estamos en la tienda, no somos conscientes de este esfuerzo realizado; la calidez del diseño de los productos, el entorno y el trato del personal hace que nos centremos en el proceso de compra.

Fuera de sus establecimientos, Mercadona mantiene una comunicación fluida y constante para detectar las necesidades de su entorno y estrechar lazos con la sociedad en la que está integrada.
Este compromiso social de la empresa lo podemos ver palpable en sus tiendas en los murales con la técnica “trencadís” realizados por Centros Ocupacionales. Están emplazados en sus secciones de horno, pescado, carne y charcutería.


Daniel VALLÉS TURMO

No hay comentarios:

Publicar un comentario