domingo, 26 de enero de 2020

Estar capacitado


El 28 de diciembre de 2019 17 miembros de Montañeros de Aragón de Barbastro, conmemoraron el 50 aniversario del Belén Montañero. Se hizo al mismo pico por la misma vía, el pico Cotiella (2.912 metros) por la vía del collado Gulliver.
Unos días antes se hizo una reunión con ellos para explicar la ruta y el material necesario. Se optó por hacer la ascensión en un día subiendo en un microbus hasta el collado. En 1959 se había alquilado una furgoneta para partir desde Víu.

El microbus salió a las 4 de la mañana, dado que se preveían entre 10 y11 horas de recorrido. A los 1.700 metros una persona no podía continuar y tuvo que quedarse una persona capacitada con ella. Lo mismo ocurrió a los 2.700 metros de altitud.
El resto de la expedición, con varias personas capacitadas, lograron hacer cumbre y descender sin ningún tipo de problema. Se había logrado el objetivo de la conmemoración.
En montaña, estar capacitado significa ser capaz de hacer la ruta con el suficiente equipamiento, preparación técnica, conocimiento de la ruta y estado físico adecuado para afrontar el objetivo.
Cuando un miembro del grupo se tiene que quedar, no se le deja solo, sino junto a una persona capacitada. En este caso, con un transmisor para estar en contacto con el resto. Así hacemos en nuestro club.
De esta forma se minimizan los accidentes y se fortalece la cohesión de los miembros del club, al saber que, en caso de haber un problema, se le va a atender satisfactoriamente.

En estilo alpino, cuando vas tres personas en cordada, la cosa cambia, pero también se mantiene el concepto de estar capacitado. Aún así, puede haber accidentes por causas inesperadas meteorológicas o caída de rocas.
Cada vez vemos más rescates de montaña en los medios de comunicación. La mayoría son por no estar capacitados para la realización de la ruta y, una pequeña parte, por causas inesperadas.

Trasladado al ámbito empresarial, ¿qué sería estar capacitado?. En Recursos Humanos se ha trabajado el estudio de competencias de los puestos de trabajo para la selección de personal para posibilitar la capacitación.
La mayoría de empresas (debido a su tamaño) no hacen uso de esta metodología de selección por distintos motivos, pero sobre todo porque no lo consideran adecuado hacerlo. Se llevan por la experiencia.

¿Cuáles son las principales causas de esta no capacitación que provoca ineficacias en la empresa?. La primera, como ya se ha comentado es la “contratación arbitraria”, sobre todo en los puestos de dirección. En ocasiones conlleva que no estén capacitados para el puesto que deberían desempeñar.

La segunda es la “miopía” de no ver el problema porque el día a día (el árbol) no nos deja ver el futuro (el bosque). No hay mayor ciego que el que no quiere ver. Se llama miopía por esto, por la incapacidad de ver de lejos. Este es un problema muy habitual en todas las empresas y es necesario tener planes de contingencia para evitar que ocurra.

La tercera es el “orgullo” para no hacer caso a otros trabajadores de la empresa o pedir ayuda externa. En este caso, se suele poner la excusa de no disponer de dinero o pensar que no va a servir de nada dicha asesoría.
La primera y la segunda causas mencionadas: la arbitrariedad en la contratación y la falta de visión de futuro tienen solución. Pero, la tercera, el orgullo (como Stephen Covey en su libro de 1989, “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva”, ya dice) no la tiene.
No es que una empresa quiera tener personas “no capacitadas”. Es la dinámica de la misma la que lleva a esa situación. A veces, es difícil diferenciar entre las causas y las consecuencias.

En el año 1984 subí al pico Cotiella en invierno por el refugio de Armella, la cara norte con las dos personas que solía subir al monte, Chemi y Juan. Fuimos andando desde Seira (con nieve desde Barbaruens) e hicimos noche en el refugio.
Los tres hemos seguido haciendo montaña de forma distinta incrementando nuestro nivel de capacitación. Yo me he dedicado más a la divulgación, pero uno de ellos ha hecho ascensiones de más de 7 mil metros.
Lo mismo ocurre en las empresas, no hay dos iguales, porque los objetivos que pretenden son distintos pero, todas tienen que desarrollar su capacitación.


Daniel VALLÉS TURMO

Publicado en Diario del Altoaragón el 26 de enero de 20120

domingo, 19 de enero de 2020

La Huesca poco poblada


Un amigo que venía a pasar unos días a una casa de turismo rural en Colungo me dijo si podía enseñarle alguna “ruta chula” de esa zona de Guara. Siendo invierno y con la niebla cubriendo Alquezar, había que ir hacia la parte norte.
Quedamos en un bar de la población a las 9:30, pero no habría hasta las 10. Así que los “urbanitas” nos quedamos sin el café al que estamos acostumbrados a tomar a esa hora prudente en una ciudad.
Subimos por la carretera estrecha y llena de curvas del puerto de San Caprasio en dirección a la ermita de San Isidro de Paúles de Sarsa. No nos encontramos ningún coche en todo el recorrido.
Aparcamos junto a la ermita y comenzamos a recorrer una ruta sencilla, pero que no está completamente señalizada, que une tres dolmenes de “Tierra Buxo” (Tierra del boj): Capilleta, Balanzas y Pueyoril.
Nos hizo buen tiempo y le gustó el paisaje, con un Pirineo nevado como telón de fondo en el norte y el Tozal de Asba en el sur. Tampoco vimos a ninguna persona en el recorrido.
Ya volviendo al coche por una tramo de carretera, un coche para. Sale una persona y me pregunta si soy el de “Caminos de Barbastro”. Me agradece por la guía de Guara de esta zona. Me dice que mañana hará una excursión por unos pueblos en torno al río Balced. Le comento a mi amigo que no estaba preparado.
Le pregunté si quería ver una granja de corderos. Llamé a un conocido y fuimos. Mientras el encargado hablaba con mi amigo, yo me puse a jugar con los perros deseosos de caricias.
Las ovejas estaban en un momento de parir los corderos. Es realmente bonito ver como nace un corderito, se va levantando para llegar a las brevas y tetar la leche de su madre en tan solo unos minutos. El instinto de la naturaleza.
Pero mi amigo vio también el lado, no tan bonito, del cuidado necesario que había que tener y la disposición día y noche para atender los partos y seguir los procedimientos adecuados para garantizar que salieran bien.
Teníamos sed y nos acercamos a Arcusa. Primero visitamos el Hotel Tierra Buxo que va a cumplir 2 años y ya tiene una puntuación en Booking de 9,9 sobre un máximo de 10.
Dos emprendedores con raíces en la población que se han formado en hostelería en otro país y han querido desarrollar su propio proyecto con un pequeño hotel muy cuidado de 5 habitaciones, un hermoso jardín y un paisaje inmejorable.
Vamos a ver si está abierto el local social. Tomamos unas cervezas y unas aceitunas. Cuando llegamos, vemos a la persona encargada jugando al parchís con otro vecino. No hay nadie más.
Cuando salimos vemos que otro vecino está cargando un jabalí, ya limpio, en un coche para llevarlo a analizar al veterinario. Habíamos oído disparos durante la excursión, pero muy lejanos.
Pensamos que con esos 15 kilos de carne ya tenía para comer bastante tiempo si lo congelaba. Se le veía contento. La posibilidad de la autosuficiencia alimenticia es una de las características de la Huesca poco poblada, como ha ocurrido tradicionalmente.
Descendemos de nuevo a Colungo, que todavía se encuentra bajo la niebla. El bar ya ha abierto y hay muchos coches que han parado para comer, aunque sea un poco tarde. Pero, no hemos encontrado ningún coche durante el recorrido.
Llego a Barbastro con la niebla todavía más prieta y lo primero que hago es entrar en una cafetería, pedir un café y leer la prensa del día. Un agradecido momento, que está mañana no ha sido posible hacer.
Si hiciéramos este recorrido en verano nos encontraríamos muchas más personas y coches. Realmente es una zona que está cogiendo cada vez más auge y se va repoblando poco a poco.
Hay un problema grande que es la vivienda para los trabajadores que vienen de fuera por el incremento de los precios por el turismo. Esto hace que tengan que desplazarse.
Me pregunto qué pensaría mi amigo después de la experiencia. Durante la ruta, decíamos en broma que parecía un reportaje de “Salvados” sobre la Huesca poco poblada. Pero, no estaba nada preparado. Por cierto, no digo despoblada, sino poco poblada.

Daniel VALLÉS TURMO
Publicado en Diario del Altoaragón el 19 de enero de 2020

sábado, 11 de enero de 2020

Barbastro, où vous allez

Estos días nos ha dejado Enrique Masgrau Loscertales, hijo del empresario que creó Aceites Masgrau que estaba situado en Corona de Aragón. Un ejemplo de la decena de empresarios catalanes que a finales del siglo XIX y principios del XX vinieron a Barbastro a desarrollar sus industrias.
Este sábado, víspera de Reyes, yendo a Serraduy he visto ya marcado el camino transfronterizo que une San Bertrán de Comminges con Barbastro por el Valle de Arán.
Ya desde la prehistoria ha habido una relación fluida con Francia a través de la cabañera de la Sierra de Sevil. En los mapas de los año 80 todavía se marcaba la construcción de una carretera transfronteriza por Bujaruelo. Por el lado francés, ya llegaba la carretera hasta el puerto.
Durante la época visigoda y árabe, vinieron muchos eremitas franceses a poblar nuestro territorio, que más tarde crearon los vínculos para que los monasterios franceses fueran quienes pagaran la reconquista en el siglo XI. En el caso de Barbastro, el Monasterio de Conques, principalmente.
El siglo XVI fue prospero por el poderío de la Corona de Aragón y los infanzones que residían en nuestra ciudad que se beneficiaron de dicha circunstancia y se reactivó la actividad económica. Ejemplo de esta situación, es que la propia ciudad es la que construye la catedral para recuperar el obispado.
Pero, es en el siglo XIX cuando Barbastro incrementa su actividad industrial debido al poblamiento del Pirineo y la venida de empresarios catalanes que desarrollan industrias, como ya se ha comentado.
Tras la guerra civil es en los años 60-70 donde se juntan las influencias en Madrid de dos ilustre barbastrenses para que se desarrolle el Plan de Riegos y el Polígono Industrial de Barbastro, declarado de preferente industrialización y con una financiación muy interesante.
Los años 90 supone el auge de las bodegas unido, en gran parte, a los excedentes monetarios de otros sectores y la crisis industrial, con el cierre en nuestra ciudad de la Moulinex.
En el siglo XXI, la capital de nuestra provincia y otras ciudades cercanas construyen polígonos industriales de capital público, siendo escasa la repercusión en Barbastro de estas inversiones.
En la segunda década del siglo XXI, por la polémica situación de Cataluña vienen empresas a las ciudades cercanas de la provincia de Huesca que cuentan con polígonos industriales con espacio.
Este hecho, esta haciendo que, igualmente, surjan nuevos proyectos agroalimentarios de capital internacional en dichas ciudades y la consolidación del “Puerto Seco” ferroviario de Monzón. Sin duda, motores para posibles inversiones futuras. En parte, muy unido a la mano de obra que puede venir de Lleida rápidamente por la autovía.
La repercusión de esta dinámica es escasa en Barbastro de momento. Sin embargo,  hemos visto como el turismo gastronómico y el de naturaleza se ha ido incrementado en la comarca.
Al igual que su papel comercial para los valles de Sobrarbe y Ribagorza (vecinos y turistas) y para los visitantes de las comarcas del este de la provincia que vienen al hospital que aprovechan para comprar.
Creo que en los próximos años se van a desarrollar más proyectos en el área oriental de la provincia de Huesca debido a las sinergias que se crearán entre las empresas que ya se han instalado.
La mayor parte, las agroalimentarias (como ya se ha visto en el sector vitinícola y cárnico) no necesitan de polígonos industriales. Por lo que no es necesario crear infraestructuras a priori.
El otro tipo de industrias, actualmente vienen atraídas por el talento y mano de obra disponible, pero sí es necesario disponer de terreno industrial disponible para posibles oportunidades exógenas o endógenas.
Creo que es necesaria una apuesta seria por “sacar lo mejor” del tejido empresarial que ya disponemos y buscar oportunidades de nuestra buena relación con Francia a través de Bielsa y el Valle de Arán.
Es un anécdota, pero interesante. Montañeros de Aragón de Barbastro es el único club español que tiene relaciones cercanas y asiduas con un club alpino francés.

Daniel VALLÉS TURMO
Publicado en Altoaragon el 12 de enero de 2020

sábado, 4 de enero de 2020

Quo vadis Huesca

Estos días navideños de niebla en la Hoya se ven muchos vecinos de Huesca huyendo de la niebla en Arguis, bien paseando, haciendo excursionismo o disfrutando con la bicicleta.
Parece que el norte haya sido la salida preferente histórica de los oscenses ya desde la antigüedad. De hecho la primera vía romana que se menciona en la guía Antonini es la Tarraco - Osca.
Huesca era una ciudad de gran importancia en la península. De hecho, en el siglo I antes de Cristo era la que más moneda acuñaba. Posiblemente, de aquí pudiera venir el interés de los romanos.
De Huesca salían tres vías, una a Zaragoza, otra a Pamplona y otra hacia el Pirineo. La que va al Pirineo pasa por Nueno (Noveno), que indica la distancia desde Huesca para luego atravesar el congosto de Arguis.
Este congosto es un extraordinario corte estratifico de las comunicaciones a lo largo de la historia: la vía romana, el puente medieval, la cabañera, la carretera de los años 20 y la nueva autovía.
En la cubeta de Arguis nace el río Isuela (de raíz íbera). Tras la sierra de Bonés, nace el río Flumen (de raíz latina). También, Arguis es un extraordinario corte estratifico del uso del agua a lo largo de los años.
En el año 1603 ya se quiso construir una mina (túnel), a la altura de la ermita de la Magdalena, para hacer una trasvase del Flumen al Isuela, pero fracasa el intento por la dureza del terreno.
Unos 50 años más tarde se hace otro proyecto, la acequia de Bonés (todavía en uso) que bordea la sierra por la cara norte para atravesarla cerca del Mesón Nuevo de Arguis.
En los mapas de los años 30 del siglo XX, se ve que hubo una central hidroeléctrica. Hoy podemos ver bajando por el camino natural a Arguis un hermoso salto de la acequia de Bonés.
En la Sierra de Guara ha habido un reciente trasvase a través de una mina entre los ríos Formiga y Calcón para llenar el embalse de este río. Pero, vemos que la idea viene de lejos.
La presa de Arguis de 1707 es la más antigua de Aragón. Se proyectó en el año 1680 y se comenzó a construir en el año 1704. Tuvo un recrecimiento posterior en el año 1929.
La presa más antigua de España es la de Tibi en Alicante del siglo XVI. En su momento fue la más importante de Europa y del mundo por su altura de más de 40 metros.
Hoy, la velocidad de la autovía hace que no haya tiempo para la historia y los paneles que lo nombran en Arguis, algunos están descoloridos por el sol. Pero, sin duda sería necesario hacer hincapié en el valor del turismo industrial que tiene esta zona.
Tanto para los visitantes como para los propios vecinos de de Huesca, para que no olviden el espíritu emprendedor milenario de sus antepasados. Porque la historia la tiene que aprender cada persona.
He estado trabajando en el ámbito del desarrollo en la ciudad de Huesca durante 25 años y espero poder volver a hacerlo. En este tiempo, la ciudad ha estado mirando más hacia el desarrollo exógeno (que venga de fuera) que el endógeno (que se produce desde dentro).
Sin embargo, la historia nos dice que la ciudad tiene un talento natural de sus habitantes que no ha dejado de desarrollarse a lo largo de los siglos. Y continua habiendo mucho talento.
Posiblemente, dentro de algunas décadas haya una travesía central del Pirineo que parta de la ciudad de Huesca. Una nueva infraestructura que se suma a las que nuestros antepasados realizaron para unir las dos partes de la cordillera.
Pero, lo más importante es “creérselo”. Es necesario hacer hincapié en la capacidad milenaria que ha tenido la ciudad para afrontar la historia a lo largo de muchos siglos de andadura.
Es necesario valorar el emprendimiento endógeno, porque es el que se queda y el que atrae al exógeno. No olvidemos que la materia prima principal del siglo XXI es el talento. Y éste a Huesca le sobra como se ha podido corroborar con los ejemplos indicados en este artículo.

Daniel VALLÉS TURMO
Publicado el 5 de enero de 2020 en Diario del Altoaragon