sábado, 22 de febrero de 2020

Yo tenía un hotel

“Yo tenía una granja en África a los pies de las colinas...” Así comienza la película “Memorias de África”. Pero, quiero cambiar la frase: “Yo tenía un hotel a las orillas de un río ...”.
Existe, La Casa del Río en el Valle de Benasque, regentado por Chema y Marta. Hace poco escuché a Carlos Barrabés en el programa “Ser aventureros” que buscaban traspasarlo por motivos personales.
Visité el hotel en el año 2013 para traer a Chema a una mesa redonda sobre el uso del Facebook en la empresa. Entonces tenían 30 mil seguidores. Hoy, ya están cerca de los 60 mil.
Antes, en el 2006, fueron pioneros en el uso de “Adwords” (el sistema de publicidad de Google), pero vieron como se iba saturando poco a poco, siendo no tan rentable, por lo que se pasaron a Facebook.
Actualmente Facebook también está saturándose y la publicidad ya no es tan rentable como lo era hace 7 años cuando valía la pena invertir porque se tenía un retorno muy interesante.
Han sido una pareja que continuamente se han reinventado para atraer nuevos clientes. La Casa del Río es un pequeño hotel vocacional con un trato muy próximo con el cliente.
Marta y Romain también podrán decir dentro de muchos años (ya que son muy jóvenes): “Yo tenía un hotel en Tierra Buxo a los pies del Asba ...” Empezaron con un pequeño hotel de 5 habitaciones en el año 2018 en Arcusa.
En un altiplano maravilloso con el Monte Perdido como fondo y con todas las posibilidades que da el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara. El paisaje desde el hotel te invita a quedarte.
Es un concepto distinto al primer hotel mencionado, pero ambos comparten dos aspectos que deben cuidar mucho: el trato al cliente y la capacidad para atraer huéspedes.
También comparten que son muy inquietos y que están continuamente adaptándose a las necesidades que ven que solicita el mercado. Dado que se encuentran en un medio rural, Internet es fundamental para comunicarse.
En ambos casos, tienen una capacidad gerencial excelente para los nuevos paradigmas de modelos de negocio en un mundo digitalizado. Es algo que tenía claro que debían hacer las empresas, que los gerentes conocieran la disrupción que está ocurriendo en el ámbito empresarial.
Lo sabía desde la experiencia desde 2012 con mi blog Caminos de Barbastro, un proyecto emprendedor sin ánimo de lucro, que me llevo en el 2014 a que una publicación en una conocida red social empresarial estuviera entre las 25 más vistas del mundo en lengua castellana.
Ahora, creo necesaria esta visión estratégica gerencial, pero veo más necesario (como ya está ocurriendo) un cambio profundo en la legislación mercantil, si queremos que se mantenga el contrato social del estandar europeo.
Estamos viendo de forma continua una guerra tecnológica entre las grandes potencias e, igualmente, un oligopolio de las empresas tecnológicas multinacionales, cada vez con más poder de influencia.
Dada la rápida velocidad con lo que están sucediendo los cambios, los usuarios tampoco somos conscientes hacia donde vamos, de aquí la necesidad de una regulación.
En nuestra economía, tenemos sectores muy regulados. Lo podemos ver si queremos montar una granja porcina, Pero, si hablamos de lo que popularmente se llaman “granjas de ordenadores”, aquí hay mucha menos regulación. Es un ejemplo.
En la época de las “vacas gordas” de las instalaciones energéticas renovables (por las grandes primas que existían), se hablaba de “huertos solares” como una alternativa a los agricultores.
Habitualmente las “granjas de ordenadores” se ponen en lugares de climatología fría. Por ello, (lo digo sin tener información suficiente) el Pirineo podría ser un lugar adecuado para este tipo de “granjas” en el futuro.
Igual dentro de 100 años, podrán nuestros descendientes ver una película que comience diciendo: “Yo tuve una granja en Huesca a los pies de los Pirineos ...” No lo sé. De momento es el sector turístico el que está creciendo en el Pirineo. Les deseo mucha suerte a los dos hoteles que he citado.

Daniel VALLÉS TURMO
Publicado en Diario del Altoaragon el 23 de febrero de 2020

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