martes, 7 de junio de 2011

Del low cost al premium


Julia Brines nos resume, en el diario Expansión del 25 de mayo, los diez puntos clave en las tendencias en alimentación según Tiago Guerreiro director de marketing y ventas de la consultora holandesa Innova Market Insights.

La primera de las tendencias comentadas es la búsqueda de alimentos con un procesado natural y que contengan el mínimo de aditivos posible. Esta limitación para los productores tiene una parte positiva y un reto.

La parte positiva es que facilita el consumo de productos de proximidad, mientras que el reto es la búsqueda de tecnologías de conservación y procesado que permitan ciclos largos de conservación suficientes para alcanzar mercados lejanos.

La segunda característica es la maximización del valor por parte del consumidor. Así, nos encontramos la adquisición de productos low cost de la marca blanca, pero también paradógicamente, productos premium mucho más sofisticados.

Esta tendencia bipolar del consumidor se explica porque cada vez se está comiendo más en casa y saliendo menos a establecimientos de hostelería, de modo que se adquieren productos de alta gama en sustitución del gasto en restauración.

Se está remarcando el consumo de alimentos saludables. Esto supone la adquisición de los denominados productos funcionales, aquellos que apuntan un beneficio para la salud, como sería la disminución del colesterol, pero con la acreditación de instituciones acreditadas.

Las funcionalidades más solicitadas están en correlación con las enfermedades con mayor proyección en la población, y en consecuencia con los medicamentos más vendidos, que tienen que ver con el colesterol, la tensión y la obesidad.

Los consumidores buscamos las etiquetas que nos advierten de aspectos de salud como “sin grasa”o “sin sal”. Y, como consecuencia, se reduce la adquisición de productos que si lleven una cantidad significativa de grasa o sal.

En la revista Consumer del mes de mayo podemos leer un artículo sobre el cambio de la pirámide alimenticia tradicional. Así, entre otros cambios, el pedestal pasa a ser ocupado por las frutas y hortalizas, en vez de los farináceos.

Algunas empresas cuyos productos están muy relacionados con la grasa y la sal, como es el caso de los embutidos, han tenido que bien lanzar productos con menores porcentajes, o bien diversificar la gama de productos con otros que el consumidor reconoce más saludables.

Así, reconocidas marcas de embutidos como son Casa Tarradellas o Palacios, han tenido que diversificar con gamas de productos que contengan menos grasa y sal, comenzando con el lanzamiento de las pizzas.

Las redes sociales pueden ser utilizadas por las marcas para comunicar directamente con los consumidores sobre la composición de sus productos, aclarar malentendidos sobre dietética, y para tener en cuenta su opinión en el lanzamiento de nuevos productos.

Esta presencia en Internet es necesaria para que los consumidores puedan obtener información directamente de la empresa y no dejarse llevar por muchas informaciones dietéticas que únicamente están basadas en los rumores.

Tradicionalmente hemos asociado los productos gourmet con el sabor y, en muchas ocasiones, por el ocasionado por su contenido en grasas. El impacto de la alta cocina hace que se pueda ampliar la base del concepto gourmet.

De forma que la creación de productos premium de gama alta, que ocupan el segmento de mercado tradicionalmente gourmet, se abre a la elaboración de nuevas recetas y sabores en un marco de saludabilidad.

En este nuevo paradigma tiene un mayor peso el predominio en los productos de los vegetales sobre los animales, tanto en su composición como en sus colores y texturas. Lo verde vende más porque lo asociamos en salud.

La alimentación deviene un hábito de salud donde se buscan más los nutrientes oligoelementos que los hidratos de carbono y grasas que dan energía. En todo caso, se aprecia lo integral y las grasas saludables.

La penúltima de las tendencias mencionadas tiene que ver con la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente. Se valora el respeto y la calidad de los procesos en los que se interactua con la naturaleza y los animales.

Por último, se reseña la importancia de referir la tecnología utilizada como información que se asocia con el procesamiento natural. Por otra parte, una estrategia muy utilizada en la publicidad de productos alimenticios.

Si observamos las páginas web de algunas de las empresas agroalimentarias más importantes de nuestra provincia, como es el caso de Harinas Villamayor, veremos que ya han diversificado sus productos hacia estas tendencias de salud.

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