Fidel Pagés Miravé

Este año se cumple el 90 aniversario de la publicación del método de anestesia epidural por el médico oscense Fidel Pagés Miravé en la Revista Española de Cirugía con un artículo titulado “Anestesia Metamérica” en 1921.

La anestesia epidural provoca una anestesia local al introducir la cánula en las proximidades de la médula en vez dentro de ella como ocurre en la anestesia intradural. Repecto a ésta última tiene la ventaja del uso prolongado en intervenciones y postoperatorio, así como menores complicaciones.

Popularmente es conocido este tipo de método de anestesia por su utilización durante los partos ya desde 1935. Su ventaja es que permite disminuir el dolor provocado por las contracciones, pero mantenerse consciente para facilitar el nacimiento.

Fidel Pagés Miravé nació en Huesca en el año 1886. Se licenció en Medicina y Cirugía en la Universidad de Zaragoza en el año 1908 para ingresar posteriormente en el cuerpo de Sanidad Militar por oposición en 1909 donde desarrolló su carrera hasta su muerte prematura por accidente en 1923.

Este ilustre oscense es un ejemplo claro de capacidad científica de innovación. Vamos a conocer aquellos aspectos que le llevaron a descubrir uno de los mayores avances en el campo de la anestesia en el siglo XX.

El primer aspecto a considerar es su espíritu científico e interés por el estudio que le llevaron a desarrollarse académicamente. Así, premio extraordinario de licenciatura, doctorado y la publicación desde 1913 de numerosos artículos propios y traducidos.

Este interés por la divulgación científica le llevaron a ser editor y fundador en 1919 de la Revista Española de Cirugía que codirigió hasta su muerte y donde divulgó su descubrimiento de la técnica epidural lumbar en dos artículos sobre la anestesia metamérica.

Fidel Pagés compagino este interés académico con la práctica médica en distintos destinos de su carrera como médico militar. En 1921 es nombrado cirujano jefe del equipo quirúrgico con destino en el Hospital Doecker en Melilla donde se produjeron batallas con numerosos heridos y muertos.

Esta doble capacidad académica y práctica fue la que le llevaron a innovar en el desarrollo de sus intervenciones. Como el mismo explica en su artículo de 1921, tuvo la idea en el proceso de una intervención.

"... al practicar una raquianestesia, tuve la idea de detener la cánula en pleno conducto raquídeo, antes de atravesar la duramadre, y me propuse bloquear las raíces fuera del espacio meníngeo y antes de atravesar los agujeros de conjunción...”

Posteriormente, al ver los buenos resultados de este nuevo método de anestesia, va provando distintos parámetros hasta definir sus posibilidades. Será en sus dos artículos de 1921 donde divulgará sus conclusiones.

Así, describió la anatomía del canal raquídeo y la técnica de la anestesia epidural, dando a conocer el material y los fármacos necesarios, analizando detalladamente las ventajas e incovenientes de este nuevo método que había utilizado en 43 intervenciones.

Lamentablemente para la ciencia española, murió a los dos años de esta publicación con apenas 37 años de edad. Ésta circunstancia de su muerte y la no traducción a otros idiomas de sus artículos, hicieron que el italiano Dogliotti presentara en 1931 como propios sus descubrimientos.

Posteriormente, ya desde 1932 numerosos científicos recordaron que el verdadero descubridor de la anestesia epidural fue Fidel Pagés, suponiendo el reconocimiento final por toda la comunidad científica internacional.

En su reconocimiento dos premios llevan su nombre. El de la Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor desde 1957, y el Premio a la Investigación en Sanidad Militar otorgado por el ministerio desde 2007.

Fidel Pagés es un caso ejemplar de como la inspiración le encontró trabajando, como dice la conocida frase del pintor Pablo Picasso. Dicho que puede generalizarse a todos los ámbitos del desarrollo humano, entre ellos el empresarial.

Su nieto Ramiro de la Mata Pagés, en su artículo “Fidel Pagés, descubridor de la anestesia epidural” publicado por la revista Dendra Médica en junio de 2010, nos recuerda esta importancia de la dedicación citando al humanista y médico Laín Entralgo.

“Los descubrimientos de los que se beneficia la humanidad no aparecen por azar. Son el resultado de una búsqueda que lleva consigo el esfuerzo de años. Nunca hubieran sido descubiertos por el científico sin un intenso estudio y una profunda dedicación.”.

Fidel Pagés nos ayuda a recordar, en un momento en que se habla tanto de la innovación como motor del futuro económico, que los nuevos descubrimientos son fruto de la conjunción entre el conocimiento y la dedicación.

Así, la innovación no se trata tanto de una competencia técnica que se puede adquirir estudiándola, sino de una actitud de metodología de trabajo que debemos desarrollar y cultivar paulatinamente en nuestros ámbitos profesionales.