martes, 24 de mayo de 2011

2.500 leguas de historia

Una canción de la Ronda de Boltaña comienza diciendo: “A Boltaña he de bajar desde Silves a estudiar...” Habla de los niños, tal vez de Casa Peña o Casa Villacampa de Silves Bajo, que tenían una legua para ir cada día al colegio.

En el año 1950 no existía la actual pista de acceso a Silves, sino que tomaban un camino. Todos los pueblos estaban comunicados de esta forma. Se hablaba de distancias en leguas. Una legua es la distancia recorrida a pie durante una hora.

Si observamos un mapa de esa época vemos como están señalizados todos esos caminos. Actualmente el camino viejo de Silves a Boltaña está limpio y señalizado por personas de la comarca entusiastas de las bicicletas de montaña.

Podemos encontrar varias web de personas de Sobrarbe sobre estos caminos. Así, www.caminosdesobrarbe.com, de la Asociación Amigos de los Caminos Tradicionales de Sobrarbe, y otras dos especiales de bicicleta, www.bttpirineo.com y www.gpspirineo.com.

Desgraciadamente, muchas de las señales de estos caminos desaparecen y se hace necesario la descarga de la rutas por GPS para no encontrarnos con sorpresas. El lado positivo es que se abaratan los costes de señalización.

En el Sobrarbe hay más de dos mil kilómetros de caminos, y en toda la provincia más de diez mil, que supondrían unas 2.500 leguas andando y unas 1.000 horas si hicieramos el recorrido en bicicleta de montaña.

Cada vez es mayor el uso turístico de estos caminos comenzando a ser una fuente importante de dinamismo turístico que permite llevar a los visitantes a todos los pueblos del territorio que en coche no se suele parar.

Muchos de estos caminos son milenarios y permiten al visitante rememorarlos según el periodo de la historia que le interese, como si se tratara de un parque temático al aire libre a lo largo de todo el territorio.

Así, desde el altozano de la Iglesia de Santa Eulalia de Silves, podemos ver los campos de Boltaña que ya fueron cultivados por los romanos, pero también el itinerario de innumerables movimientos de ejércitos desde la reconquista musulmana hasta las guerras de sucesión, independencia y civil.

Existen cientos de escenarios en estos caminos que nos trasladan en los siglos, como el abrevadero de Puimorcat, o rutas temáticas, como la reciente inaugurada Joaquín Costa, que nos hacen contemplar el territorio desde otra perspectiva.

Pero si los caminos eran importante en la historia, también lo fueron los mesones que permitían los traslados desde las montañas a las ferias de los somontanos en un equilibiro milenario de intercambio de productos.

Mesones que todavía encontramos junto a las carreteras donde los viajeros se refugiaban de las tormentas, dejaban encargos para otros paisanos y se enteraban de las noticias de pueblos cercanos y lejanos.

Actualmente tenemos miles de plazas turísticas en los pueblos de estas montañas donde se alojan los turistas que nos visitan. Gracias a las nuevas tecnologías podemos hacer que estos establecimientos vuelvan a tener el alma de los mesones.

El mesón como hospedería, pero también como lugar de información, de encuentro y de intercambio. Las tecnologías de Internet y GPS que disponen los nuevos teléfonos móviles permiten esta función renovada.

Cada vez hay más establecimientos de hostelería con Wi-Fi gratuita. Es necesario para los turistas porque de esta forma se puede acceder a la información turística de la zona sin tener tarifa de datos o sin pensar en el volumen de datos que estamos descargando.

Así, junto al cartel de existencia de Wi-Fi gratuita, también podríamos exponer un listado de los recursos existentes en Internet para que se consulten, incluidos los propios del establecimiento, de modo que podemos mantener el contacto posterior con los clientes.

Sobre todo, habría que hacer incidencia en aquella información que nos podemos descargar en el teléfono para realizar un ruta posterior. Aquí, volveríamos a la función de recomendación de los mesoneros sobre el estado de los caminos.

Muy importante, tanto para que el visitante tenga una buena experiencia como para mantener su fidelización posterior, son las herramientas que permiten las redes sociales de recomendación y geolocalización.

De esta forna, podemos conocer otros comentarios y recomendaciones de otros usuarios que han pasado por el establecimiento. De nuevo volvemos a la función de intercambio de noticias de los mesoneros.

En este caso las nuevas tecnologías nos pueden ayudar a que no se pierda el alma de los mesones junto a los caminos. El sentido de la acogida, de la recomendación y del compartir que dejan impronta en quienes nos visitan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario